EL DESIERTO
(Elegía para Mohamed Bahi)
Pero si el corazón no le subyuga la mano,
Tampoco le violentará el brazo
ALMUTANNABI
Tampoco le violentará el brazo
ALMUTANNABI
1
De repente me sentí abatido. ¿Habrá alguna sombra
en este páramo que no se acaba? Sólo hay
un lugar para la contemplación y la añoranza. La
nada.
Deambulábamos entre las zarzas, las rocas herrumbrosas
y las malezas, entre las raspas de sal
y los ásperos regatos. La arena de las dunas se resistía
al tiempo. ¿De dónde viene este fulgor que
ciega? ¿Irrumpe del jade o del cuarzo? Su silenció
me espantó. Veía cómo se agrietaban los labios y
se desangraban. El agua de los pellejos se había
agotado. Mi asombro me anegaba. ¿Eran dunas o
el lomo de peces en fuga? ¿Eran dunas o mujeres
desnudas?
Reclamo la generosidad de tus ojos. Tu alma es
luz.
(...)
Hassan Najmi nació en 1960 EN Benhmed, al sur de
Casablanca. Vive y trabaja en Rabat. Es doctor en literatura
árabe contemporánea. En la actualidad es el director
del periódico Al Ittihad Al Ichtiraki. Fundó en 1996
la Casa de La poesía de Marruecos y fue su vicepresidente.
En 1998 fue elegido presidente de La Unión de
Escritores de Marruecos y en el 2001 se le eligió de nuevo
para un segundo mandato hasta febrero del 2005.
Casablanca. Vive y trabaja en Rabat. Es doctor en literatura
árabe contemporánea. En la actualidad es el director
del periódico Al Ittihad Al Ichtiraki. Fundó en 1996
la Casa de La poesía de Marruecos y fue su vicepresidente.
En 1998 fue elegido presidente de La Unión de
Escritores de Marruecos y en el 2001 se le eligió de nuevo
para un segundo mandato hasta febrero del 2005.
2 comentarios:
Otro poema precioso venido de el país inexplorado cada vez más visitado.
Su poesía es dulce como la miel fresca, y romántica como un atardecer.
Me encantan.
Son preciosos, y dulces.
Gracias por dárnoslo a conocer, Jaime.
Es fascinante descubrir toda esta poesía de autores marroquíes. Quería compartirla con todos los visitantes de este lugara llamado Babia.
Gracias Arwen por apreciarlos, me llenas de felicidad.
Un beso.
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