Cuando pienso que todo lo que crece
su perfección conserva un mero instante;
que las funciones de este gran proscenio
se dan bajo la influencia de los astros;
y que el hombre florece como planta
a quien el mismo cielo alienta y rinde,
primero ufano y abatido luego,
hasta que su esplendor nadie recuerda:
la idea de una estada tan fugaz
a mis ojos te muestra más vibrante,
mientras que Tiempo y Decadencia traman
mudar tu joven día en noche sórdida.
Y, por tu amor guerreando con el Tiempo,
si él te roba, te injerto nueva vida.
su perfección conserva un mero instante;
que las funciones de este gran proscenio
se dan bajo la influencia de los astros;
y que el hombre florece como planta
a quien el mismo cielo alienta y rinde,
primero ufano y abatido luego,
hasta que su esplendor nadie recuerda:
la idea de una estada tan fugaz
a mis ojos te muestra más vibrante,
mientras que Tiempo y Decadencia traman
mudar tu joven día en noche sórdida.
Y, por tu amor guerreando con el Tiempo,
si él te roba, te injerto nueva vida.
William Shakespeare
3 comentarios:
Que chevere que publiques tantos escritos de poetas internacionales. Siempre es bueno volverlos a leer, y aquellos que no disponimos de libros nos haces un gran regalo ilustrandonos estos bellisimos poemas. una abrazo desde Venezuela
Que chevere que publiques tantos escritos de poetas internacionales. Siempre es bueno volverlos a leer, y aquellos que no disponimos de libros nos haces un gran regalo ilustrandonos estos bellisimos poemas. una abrazo desde Venezuela
Los clásicos son los eternos best-sellers y siempre nos iluminan, tanto como lectores o escritores.
Un abrazo, querida Judith.
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