FLASH DE NOVEDADES:

Citas de Heinrich Heine: "Si quieres viajar hacia las estrellas, no busques compañía" █ "Los sabios emiten ideas nuevas; los necios las expanden". █ "La verdadera locura quizá no sea otra cosa que la sabiduría misma que, cansada de descubrir las vergüenzas del mundo, ha tomado la inteligente resolución de volverse loca". █ "Allí donde se queman los libros, se acaba por quemar a los hombres". █ "Un amigo me preguntaba porqué no construíamos ahora catedrales como las góticas famosas, y le dije: Los hombres de aquellos tiempos tenían convicciones; nosotros, los modernos, no tenemos más que opiniones, y para elevar una catedral gótica se necesita algo más que una opinión."

Ciudadanos de Babia

17.4.12

Toda obra es un diálogo con otras.

La intertextualidad es un concepto literario definido por la crítica en el siglo pasado, que se refiere al hecho de que cada texto se relaciona con otros. No hay obra cerrada y autónoma: todas evocan, de manera más o menos explícita, temas, estilos, estructuras de otras; todas incorporan -mediante la cita, la alusión, la imitación, la parodia o la ironía- expresiones artísticas anteriores. En pocas palabras, toda obra es un diálogo con otras, las pasadas y las por venir.

Aquí, dos ejemplitos de intertextualidad en la disfrutable forma de microrrelatos:

"El cuervo preparado", de Álvaro Yunque, con la célebre fábula del zorro y el cuervo

El Cuervo, subido a un árbol, estaba no con un queso según dice la fábula clásica, sí con un sangriento pedazo de carne en el corvo pico. Llegó el zorro. El olor lo hizo levantar la cabeza, vio al cuervo banqueteándose, y rompió a hablar.

¡Oh, hermoso cuervo! ¡Qué plumaje el tuyo! ¡Qué lustre! ¿No cantas, cuervo? ¡Si tu voz es tan bella como tu reluciente plumaje, serás el más magnífico de los pájaros! ¡Canta, hermoso cuervo!
El cuervo se apresuró a tragar la carne, y dijo al zorro:
—He leído a La Fontaine.

"Lot", de Olga Harmony, de ecos bíblicos


¡Qué tedio puede llegar a padecerse al lado de un justo!
Todos se divierten en Sodoma, menos en esta familia en la que tanto se teme al pecado.
Y, exasperada, la mujer de Lot prosiguió su soliloquio:
—¿Es que nada vendrá a darle sabor a mi vida?

No hay comentarios:

Vota este blog en Bitacoras.com ¡Gracias!

votar