5.8.10

En mi oficio o mi arte sombrío

En mi oficio o mi arte sombrío
ejercido en la noche silenciosa
cuando sólo la luna se enfurece
y los amantes yacen en el lecho
con todas sus tristezas en los brazos,
junto a la luz que canta yo trabajo
no por ambición ni por el pan
ni por ostentación ni por el tráfico de encantos
en escenarios de marfil,
sino por ese mínimo salario
de sus más escondidos corazones.

No para el hombre altivo
que se aparta de la luna colérica
escribo yo estas páginas de efímeras espumas,
ni para los muertos encumbrados
entre sus salmos y ruiseñores,
sino para los amantes, para sus brazos
que rodean las penas de los siglos,
que no pagan con salarios ni elogios
y no hacen caso alguno de mi oficio o mi arte.

Dylan Thomas

Versión de Elizabeth Azcona Cranwell

4 comentarios:

  1. Interesantes reflexiones,me llevan a pensar a mi vez ¿para qué escribo yo?... No sabría darte así de repente, aquí y ahora, una respuesta certera. Me vas a obligar a pensar jajaja, eso es bueno, di que sí. Me gusta tu blog. Nos leemos

    ResponderEliminar
  2. A eso se le llama amor al arte :-)

    Escribir, de la forma más pura que existe, describiendo sentimientos y sensaciones sin importar si cobrarás, o si ellos lo leerán. Lo importante es recrearse en el momento.

    Un saludo.

    Oski

    ResponderEliminar
  3. una belleza. Que poco conoce uno de los grandes poetas de la literatura universal.Gracias por ilustrarnos a todos. besos

    ResponderEliminar
  4. Nos busquemos razones del "porqué escribimos". Escribamos solamente e ilustremos.

    Un abrazo a todos vosotros.

    ResponderEliminar